Estás fatigado y necesitas unos segundos de descanso y desconexión. Aprovecha y ríete un rato que la vida son dos días. Aquí descubrirás los mejores chistes de pueblerinos. En los pueblos nos reímos de todo pero si vienes de la ciudad y nos cuentas chistes buenos de pueblo nos reiremos todos juntos. Hay chistes buenos o buenísimos, graciosos, chistosos, groseros, largos y cortos. Si hay algún chiste que tienes y no está en la página, no lo puedes enviar y lo publicamos
Chiste de un pueblerino y su burro
En un pueblo se está construyendo una carretera. Un pueblerino se sentaba largas horas a ver como se realizaba la obra cuando se topó con el ingeniero.
– Hola, soy George Frank Steven, el ingeniero que hizo los estudios y encargado de la obra y la maquinaria.
– Hola, yo soy Eustaquio Díaz, soy del pueblo de al lado.
– Veo que nunca habías visto cómo se hace una carretera moderna. Dime, ¿Cómo hacen las carreteras en tu pueblo?
– Bueno, en mi pueblo cuando queremos hacer una carretera de un pueblo a otro, soltamos un burro viejo y el animal escoge el camino más corto y más seguro y por ese camino hacemos la carretera.
– ¿Y qué pasa si no tienen un burro?
– ¡Llamamos a un ingeniero!
Lucifer en el pueblo
Paco, el jorobado del pueblo, pasea por el campo y de pronto, un estruendo y aparece Lucifer:
– ¡Tú! ¿Qué llevas en la espalda?
– Yo, yo… una joroba.
– Pues ¡¡¡flís, flas!!! ¡Ya no la tienes!
Y con un movimiento de manos la joroba desaparece.
Al día siguiente el jorobado se encuentra con su amigo Pepe, que es cojo.
– Pepe, tienes que creerme. El tipo hizo ¡flis-flas! y
me ha quitado la joroba.
– Bueno, pues voy a ir yo, a ver si me quita la cojera.
Y Pepe va al mismo lugar del campo.
De pronto se oye el estampido y aparece Lucifer:
– ¡Tú! ¿Qué llevas en Ia espalda?
– Yo… ¿En la espalda?… Nada.
– Pues.“ ¡¡¡flis, flas!!! ¡Ahí tienes una joroba!
Los del Lepe son muy de pueblo
¿Por qué los de Lepe no salen nunca del pueblo?
– Porque a la salida solo hay un letrero que pone Huelva.
Chiste de los borrachos del pueblo
Dos borrachos que están en la plaza del pueblo y uno le dice al otro:
– Compadre, ¿por qué no montamos un bar?
Y le dice el otro:
– ¡Venga!, pero ¿y si nos va malamente?Y le contesta el otro:
– Pues si nos va malamente lo abrimos al público.
Más Chistes